La Alianza-Centro-Bajío-Occidente apunta a convertirse en la región más competitiva de América Latina, esto se debe en gran medida por la contribución del sector automotriz para el desarrollo económico. La alianza conformada por Jalisco, Aguascalientes, Querétaro, Guanajuato y San Luis Potosí se ha posicionado en uno de los polos más relevantes para esta industria en el continente americano, según el diario Líder Empresarial.
Nueve de las doce marcas ensambladoras instaladas en México están ubicadas en esta región:
- Jalisco: Honda.
- Aguascalientes: Nissan y Daimler.
- Guanajuato: General Motors, Honda, Ford, Mazda, Toyota y Volkswagen.
- San Luis Potosí: BMW Group y General Motors.
- Querétaro: no cuenta con ninguna planta armadora, sin embargo, alberga a grandes proveedores como Autoliv y Continental.
Cabe mencionar que el polígono también acoge a 850 empresas que forman parte de la cadena de suministro automotriz.
Estos cinco estados son responsables del 30.8% de la producción de autopartes de México, cifra superior a la registrada por el compuesto de Estado de México, Zacatecas, Puebla, Durango, CDMX, Morelos, Tlaxcala, Chiapas, Sinaloa e Hidalgo (17.4%). Este bloque únicamente es superado por los estados que conforman la frontera norte (Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas), cuya suma contabiliza el 51.8% de la fabricación de autopartes.
¿Existe margen de crecimiento?
Especialistas apuntan en que el escenario luce complejo para atraer otra OEM. Sin embargo, coinciden que la reconfiguración del T-MEC abre una posibilidad para atraer proveedoras extranjeras, especialmente a aquellas empresas de autopartes que están fabricando en Asia, y busquen relocalizarse en el continente americano.
En entrevista con Líder Empresarial, Carlos Zegarra, Socio Líder Management Consulting en PwC México, afirma que los esfuerzos en atracción de inversión extranjera deben atender la necesidad de la industria de reestructurar las cadenas de suministro globales. Por lo anterior, trasladar una parte de la producción a México podría generar la resiliencia y la agilidad necesarias en diferentes nodos de las cadenas productivas del sector automotriz.
El experto de PwC comparte que reubicar operaciones de manufactura a México podría reducir los costos de producción en 23%, en comparación con otros mercados asiáticos.
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Líder Empresarial. ¿Qué tanto más puede crecer el Gigante Automotriz de México?