Al permitir adquirir un producto o servicio desde casi cualquier dispositivo, el e-commerce continúa ganando popularidad y recientemente se ha convertido en el método favorito para comprar. De acuerdo con el Estudio del Consumidor 2020 de Zebra Technologies, los usuarios prefieren comprar en línea porque encuentran ventajas como envío gratuito, disponibilidad de los artículos en varios sitios y ofertas exclusivas, entre otros beneficios.

Teniendo en cuenta lo anterior, se espera que las compras en línea sigan incrementando, especialmente en fechas como El Buen Fin y la temporada navideña. Entregar pedidos en la fecha acordada es una carrera contra el tiempo, por ende, los días con alta demanda son un gran reto para la operación de grandes y pequeños negocios. También son una oportunidad para demostrar qué tan preparados se encuentran para poder entregar rápidamente y en óptimas condiciones el producto hasta las manos de su cliente.

Al hacer clic en el botón de “comprar” el consumidor pierde la noción de qué sucede después e incluso antes para que los negocios se preparen para recibir la orden. Alguna vez te has preguntado ¿cuáles son los pasos para que el producto llegue a la puerta de mi casa en uno o dos días?

Según Zebra Technologies, las siguientes fases son esenciales para los vendedores. Implementarlas correctamente podrán evitar contratiempos y permitirán a las empresas tener un control interno más detallado de las operaciones, apunta la revista T21.

Fase 1: Recolección y embalaje del pedido

Es importante recibir la orden a través de un sistema llamado WMS (sistema de administración de almacenes). Este indica el pedido y la ubicación de los productos en la bodega, para poder localizarlos con facilidad.

Se potencializa su función si se cuenta con soluciones de localización y dispositivos como computadores móviles, tabletas o terminales robustas, con el fin de que las personas puedan moverse entre los pasillos libremente y ser más eficientes en la localización y alistamiento de pedidos.

Estos sistemas permiten descontar los productos del inventario (en tiempo real) para tener exactitud de los productos disponibles.

Fase 2: Alistamiento

El producto debe separarse. A través del sistema, el trabajador que tiene esa orden recibe la indicación del lugar o caja donde debe ubicar el producto para ser envuelto y posteriormente despachado. Paralelamente, el área de envíos recibió los datos de entrega de la orden e imprimió una etiqueta de código de barras o tag de identificación para la caja donde irá el pedido hasta su destino.

Las impresoras de etiquetas de identificación son la base para la adecuada digitalización de las operaciones de comercio electrónico.

Fase 3: Distribución y entrega

Para esta etapa el sistema ya ha notificado al comprador (generalmente por correo electrónico) que el pedido está listo.

En esta fase se define el horario de salida con la empresa transportadora. El transportador recoge el paquete y genera una guía. El paquete es llevado a un centro de recolección donde se agrupa con otros pedidos, según la zona de su destino.

El uso de softwares diseñados para gestionar las rutas, cargar de forma optimizada los camiones, recibir y generar notificaciones del proceso son cruciales para poder entregar a tiempo. Esta fase es conocida como “última milla” y es aquí cuando el pedido viaja hacia su destino final. Con la tecnología adecuada, el cliente puede ir siguiendo virtualmente la ruta de su compra, hasta tenerla en sus manos.

Fase 4: Recepción

Sin duda la fase más emocionante para el comprador, finalmente el envío llega a su destino final. El cliente firma digitalmente y/o confirma haberlo recibido. La tecnología móvil permite al trabajador notificar que el pedido fue entregado y/o recibido adecuadamente y el proceso inicial ha terminado.

Información tomada de:

T21. E-commerce y El Buen Fin, ¿qué sucede después de dar clic al botón “comprar”?